Probablemente de aquí a unos cuantos años yo pueda necesitar todo lo que hoy en día proporciona de información a los seres humanos. Pongo el ejemplo del embarazo, para saber si mi hijo pueda desarrollar algún tipo de enfermedad, puedo recurrir a la investigación de la genética humana y gracias a la ciencia saber si mi hijo saldrá sano y si sale el caso de que tiene algún posible desarrollo de una enfermedad tratarlo a tiempo para que crezca como cualquier otro niño, sin tener ningun tipo de complicación.
La genética ha influido también en el campo de la alimentación donde gracias a la ciencia se han podido modificar las características de los alimentos, hacer que los cultivos sean más resistentes a la plaga de insectos o a los herbicidas, o también ha sido posible cambiar su color o su forma, o incluso se han podido llegar a combinar dos alimentos creándose uno sólo con característica de los dos de los que procedía.
Como se comentó en clase, Monsanto es una de las principales empresas de alimentos y todo vendedor depende de dicha empresa si éste quiere un cultivo más sano y sin riesgos de infecciones para los compradores. Un ejemplo es la venta de maíz. El maíz que vende Monsanto está desarrollado en el laboratorio y tiene muchas menos posibilidades de ser dañino para alguien, por ello todo agricultor le compra a esta fábrica que es la más grande del mundo. Para beneficio de la empresa este maíz no genera semillas para cultivarlo seguidamente después de recoger la primera cosecha, si el señor del campo desea cultivar, nuevamente tendrá que ir a Monsanto y comprar más semillas. Ya que todo gira en torno a la economía, que el cultivo no genere más semillas les proporciona un gran beneficio económico ya que quien cultive tendrá que volver a comprar más semillas para seguir el ciclo alimenticio.
Hoy en día la producción de los productos transgénicos está muy elevada y muchos de los productos que hemos ingerido posiblemente lo sean sin que nos hayamos dado cuenta, por ello, muchas potencias están intentando que los productos que sean geneticamente modificados estén etiquetados como tal para nuestra información.
Determinados gobiernos quieren implantar los alimentos transgénicos en los países del tercer mundo, ya que seguramente esto les beneficiaria económicamente a los países muy desarrollados y a los países tercermundistas posiblemente no tendrían tantos problemas de enfermedades al ingerir alimento cultivados por los propios agricultores que no están investigados en el laboratorio y si pueden tener alguna infección para el hombre.